BUROCRASIA FIU, FIU
FENÓMENOS PAPELARIOS
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... Y MUY PRONTO, |
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FENÓMENOS PAPELARIOS
Es consabido que
El otro día en el lavabo de nuestro departamento, encontramos encima del recipiente metálico que contiene del papel higiénico, al lado del cagadero, otro rollo de papel. Allí estaba. Suelto. Como dejado de la mano de dios...
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CONSULTA MODELO PARA PROCEDER A EXTRACCIÓN.. |
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El susodicho papelete tenía un aspecto usau, marginal, un pelín amarillento en algunas zonas, y manifiestamente bufado y arrugado. Especialmente, eso: arrugau.
Cualquier tipo con dos dedos de frente, se hubiese percatado que el aspecto del papelito denotaba un aire más sospechoso que el duo Torrente-Maiquel Jakzon en una Guardería. No sólo por su ubicación deslocalizada e impropia, sino por su imagen degradada de papelucho secado al aire libre tras zambullirse en un medio acuoso.
Estaba claro que el papel había perdido su virginidaz blanquecina a golpe de submarismo, probablemente en algún charquito. Y teniendo en cuenta que se hallaba en un lavabo de dos por dos, de charquitos, pocos (uno) y perfectamente reconocibles.
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EN INGLÉS TAMBIÉN VAN DE CACHONDEO. |
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Ya se sabe que detrás de todo episodio de calamidad esperpéntica, aparece el rostro de un hombre incrédulo de sí mismo.
Consecuentemente, puede afirmarse que el sujeto protagonista de esta historia, compulsivamente nervioso, estupefacciado de su patosidad, y con la gotita de sudor lliscando pabajo, trató de remediar el marrón pocilguero, profundizando en el desastre.
Una vez caido el papel de water dónde no debía y tras agacharse hasta meter las dos manos en el agua y media cabeza en la taza, debió iniciar un pertinaz chapoteo en el aguita estancada generando icebergs aquosos.
Mientras las salpicaduras inundaban todo el perímetro, como consecuencia lógica de las cogidas y caidas del papel de sus manos a la taza, y de la taza a sus manos. Él debía ir pensando “¿Cómo coño me saké una licenciatura, joder?¿cómo?”. Gran pregunta, amigos, gran pregunta.
Efectivamente, de esta imagen patética a crear un juego llamado “RETRETEAR”, sólo hay un paso. Este tipo lo dio, y ahí es ná.
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MODELO "ESCONDE PEIPER PA SECÁ". |
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Bien, la lógica es esquiva. Y en este caso más.
Un hombre en un lavabo y con merdé de por medio, es una bestia enjaulada. De ahí que lo normal hubiese sido tirar precipitadamente de la cadena vateriana, pisoteado con el pie la obturación consecuente, ¡raka!, ¡raka!, y pirarse raudo y veloz... ¡kaskando kalaveras!.
Pim, pam.
Por el contrario nuestro hombre naufragaba en sus acciones patosoides. Se ahogaba en una tasita de aguachirri.
Un solo y estúpido objetivo debía rondar la cabeza del Perpetrador: rescatar al náufrago uvecé de las aguas putrefactas, probablemente amarillentas, y con ello, salvar aparentemente, el honor. Su honor.
La vendetta contra la sociedad estaba servida. En bandeja de urinario.
Bajo el solidario lema de “Si cho soy VIZTIMA, ¡vosotros lo seréis también!”, nuestro amigo preparó, planeó y perpetró la venganza: El tío cerdo, embadurnau de su propio meau, dejaba su obrita náutica a un ladito. Cerca del water.
Naaaaaada de tirarla a la basura. No, amigos, no,... ¡qué vaaaaa!.
Actuando a sabiendas, sin oscuridad y con total desprendimiento amoril por el prójimo, dejó el papé atufau ahí mismito. Ahí al laete: pa que fuera ... reutilizado.
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OTRO MODELITO "AMAGA PEIPER" MÁS EFECTIVO EN SU INTENCIÓN. |
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Al buen observador, pocas pruebas son suficientes. Bajo la inspiración de Chetlo Jolms, y propulsado por “la bufeta, que cuando apreta, más vale bajarse la bragueta”, un servidor descubrió el rollito pestoso en la primera visita al lugar de los hechos.
Mi mente todopoderosa vislumbró el maquiavélico plan del hacedor de todo aquel tinglado, y ahí nació la duda. Mi duda.
La duda entre callarme y disfrutar en silencio de las “cagadas” de los imprudentes funsionarios que fueran secándose con el rollito pringoso, o bien proceder a poner en público conocimiento los rebeladores y aterradores datitos.
Desgraciadamente para el cachondeo, en el fondo, soy un buenazo, un solidario irremediable. Un alma caritativa.
Cual arcángel del Bien, procedí a denunciar abiertamente la maniobra barriobajera del anónimo creador de aquella villanía.
A tal fin, coloqué encima del “peiper uvecé”, y pegada con celo, una notificación clarividente desvelando las aventuras y desventuras que había padecido el susodicho papelucho, y de las consecuencias que su uso imprudente, podrían tener en el sujeto hacedor.
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VERLO, ES MEJOR QUE UN LAXANTE, TATU ! |
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El documento decía lo que sigue:
“NO HE CAIDO... ¡MANTIRAU!
NO ESTOY MOJAETE...¡ETOY CHOPAU!
NO ESTOY DEFORME... ¡ESTOY ARRUGAU!
Y pol tanto, no te olvides de... ¡ USALMEEEEE !”
Gracias a mi acción, todo el departamento salvó, sinó la cara, sí su culo.
Todos avisados, todos salvados....
Pero... ¿todos?
De lo que se va a contar en adelante, se deduce que en la actualidad ya no sirven ni los Robinchuts belicosos, ni los San Pancrás gluriosos, ni el “Avisador Impenitente”.
El lado oscuro triunfa a expuertas.
Y sobre todo, se verificó que en nuestro departamento estamos bien gobernados. Mu bien gobernados. En concreto, por un “Mótruo”. Un “Motruo Mental” con elefantiasis cerebral perpétua.
Al poco de lo explicado, nuestro jefe de sección entraba en el aseo, procedía a aligerar cañerías, daba ambiente al lugar, salía y se volvía a su pecera-oficina con absoluta satisfacción. Todo ello, bajo nuestra escrutadora mirada. La del funsionariado produztivo.
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¡ MONTAÑAS POR USAR ! |
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¿Y qué hallaron nuestros ojos al entrar en el váter?
Se fiscalizó lo que parecía imposible y se concretó lo inconcretable.
El Jefasu demostrando bien no entender los dobles sentidos o bien no saber leer, o quizá en el peor de los casos, confirmar nuestras sospechas de que el Gran Hombre es una auténtico ceporro y un guarrindongo de cuidau, usó el papelito amarillento con total tranquilidaz y desprendimiento.
Riqui, riqui. Raqui, raqui. Riquitú
¡Y tan panchito, se nos quedó!
Tres semanas después de este magno acontecimiento, sigue vivito, coleando y taladrando nuestro oidos, a pesar de los auspiciantes malos augurios, y los vaticinios más RIPeantes.
Nos alegramos. Un poco. No mucho, la verdad. Pero bien está lo que bien acaba.
No obstante, de un tiempo a esta parte, al jefecillo se le detectan ciertos efectos secundarios post-actuación kamikaze: no para de rascarse el culito.
Riki, riki, raka, raka. Rikitú
Seguidito de lo cual, se huele la “manito”. Ese gesto se ha convertido en un tic. Su tic. Consolidado, vamos.
Y no sólo eso, sino que ahora le sale una ramita de HierbaBuena por la oreja derecha. Al parecer su cerumen es de los buenos: con abono añejo.
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NO SEAS TÍMIDO, ¡ EXPÁNDETE ! |
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Y por cierto.... ¿han venido los de la limpieza a asear y tirar el famoso papelín del Water?
... ¡¡Pero de qué vas, bitter-kas!!
Esto es otro mundo. El maravilloso mundo funsionaril.
PD: El último expediente X del lavabo departamental tiene su centro neurálgico de atención en dos clips. Dos clips que aparecieron en el fondo del vater un buen día. De la noche a la mañana. Permanecieron allí días y días, aguantando el chaparrón del agua a chorros de las tiradas de cadena de la cisterna.
Y un buen día, los clips desaparecieron .... misteriosa y sigilosamente.
Pim, pam
¿Qué pasó?
¿Cómo los extrajeron?
¿Quién los abdujo?
¿Por qué y para qué?
¿Quién los guarda y con qué propósito?
... estas y otras preguntas laten en el debate abierto de este espacio conversacional que es nuestro remanso funsionaril. Hay temita pa rato... ¡Ñik!
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DALT |
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